
Desde siempre he escrito cosas por ahí, y siempre pensé que publicarlas era de alguna u otra forma "expresar el lado cursi que todos llevamos dentro", Así tal cual. El hecho de publicar cosas que a nadie le importaba leer era, desde mi punto de vista mas critico, una absoluta tontería.
Sin embargo de un tiempo para acá he encontrado de suma importancia dejar por escrito algunas experiencias, y claro, hoy en día publicar en una red social temas personales o de poca relevancia los convierte (En mi humilde opinión) inmediatamente en analogía de esas botellas de vidrio de películas antiguas, en las que el protagonista depositaba un mensaje escrito en donde ponía sus deseos o anhelos y posterior a eso, los arrojaba al mar para que el destino guiara dicha botellita hasta un destinatario no conocido. Misma cosa ocurre al escribir en un papel y arrojarlo al viento, a su suerte.
Quizá por esta imagen mental que desarrollo instantáneamente (La de “La botellita” y “La hoja”) sea la causa de que me cueste tanto publicar algo. Aunque hoy en día ya no arrojamos botellas al mar ni papeles al viento, escribimos todo en la web, y yo en lo personal, escribo para ahondar en mi propia conciencia (Esa tan reprimida a veces) y que misteriosamente ha logrado captar buenos comentarios. Sin ir mas lejos, quería agradecer a quien lee esto y me lo hace saber después (contribuyen a que poco a poco me quite el trauma de “la botella”), y también a quien me dijo una vez que respondía todo como si fuera un “guión”, vaya a saber uno las vueltas que da la vida y quien sabe, a lo mejor me ánimo y escribo uno algún día.

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